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Quiénes Somos
Quiénes somosLa Organización Internacional para las Migraciones (OIM) forma parte del Sistema de las Naciones Unidas y es la organización intergubernamental líder que promueve desde 1951 una migración humana y ordenada para beneficio de todos, con 175 Estados Miembros y presencia en más de 100 países. La OIM tiene presencia en el Triángulo Norte de Centroamérica desde 2014.
Sobre nosotros
Sobre nosotros
OIM Global
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Nuestro Trabajo
Nuestro TrabajoComo organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve la migración humana y ordenada, la OIM juega un rol clave en cuanto a apoyar el logro de la Agenda 2030 por medio de diferentes áreas de intervención que conectan a la asistencia humanitaria con el desarrollo sostenible. En el Triángulo Norte de Centroamérica, la OIM ofrece una respuesta integral a las necesidades humanitarias de los migrantes, los desplazados internos, los repatriados y las comunidades de acogida.
Prioridades transversales
Prioridades transversales
- Datos y Recursos
- Actúa
- 2030 Agenda
Nombre: Luis, a 9.988 km de casa.
Ocupación: Ingeniero consultor de redes.
País de residencia: Polonia.
País de origen: Honduras.
Uno siempre emigra con la idea de no irse permanentemente. En mi caso, me fui a Barcelona para sacar una maestría en la Universidad Politécnica de Cataluña. Eso fue en septiembre de 2013. Una vez allí, gané una beca de investigación y a principios de 2017 me incorporé en el equipo de Cisco como ingeniero consultor de redes en Cracovia (Polonia).
En todo este tiempo, siempre me he sentido bastante bien. Extrañaba mis amistades con las que salía a jugar a futbol, pero poco a poco he ido conociendo a nuevas personas que le sirven a uno de soporte estando fuera.
El primer reto al que tuve que enfrentarme cuando llegué a Polonia fue el idioma. El polaco es bastante complicado. Hay muchas palabras que apenas tienen vocales, y yo me pregunto “¿esto cómo se pronunciará?”. Me he encontrado en algunas situaciones difíciles, especialmente a la hora de hacer algún trámite legal. Sin embargo, la tecnología nos hace la vida más sencilla: en el supermercado le tomo una foto a la etiqueta de un producto y automáticamente lo traduce.
Sí he notado una diferencia muy marcada entre el carácter de la gente en Barcelona y en Cracovia. Pero no tan pronunciado como me decían antes de llegar allá. A veces, nos dejamos llevar por los estereotipos. Cuando vivía en Tegucigalpa también me decían que los españoles podían llegar a ser prepotentes. Pero para mí la gente de España fue siempre muy cálida y nunca tuve problemas.
En la empresa para la que trabajo hay personas de 50 nacionalidades diferentes. Venimos de diferentes lados, hacemos las cosas de maneras diferentes, y por nuestras experiencias previas a veces afrontamos las situaciones de manera distinta. Pero creo firmemente que la multiculturalidad enriquece y aporta de manera positiva.
La verdad es que no sé si la situación en Honduras ha mejorado en estos 4 años que llevo fuera. Mi papá sufrió una experiencia muy fea: por robarle el carro casi lo matan. Eso aceleró su decisión de marcharse a vivir en Estados Unidos, donde tiene residencia permanente. Vivir tranquilo no tiene precio.
En mi caso me marché por crecimiento profesional. La verdad es que en Honduras lo tenía todo: estaba cómodo, tenía buen trabajo. Pero se dio la oportunidad y decidí tomarla. Para mí ahora es un poco difícil regresar a Honduras, porque mi familia también ha emigrado.
La forma de vivir europea me gusta mucho. Es más tranquila y siempre hay cerca tantos lugares interesantes que conocer. En estos momentos es algo que quiero seguir haciendo: seguir viajando, seguir conociendo. Y continuar creciendo profesionalmente.