Nombre: Iván, a 363 km da casa.
Ocupación: Emprendedor y biólogo.
País de residencia: Nicaragua.
País de origen: El Salvador.

“Siempre hay que ver los cambios como una nueva oportunidad”, dice Iván al referirse a los desafíos que supone movilizarse hacia otro país para establecerse en él.

Iván es un biólogo que durante gran parte de su vida profesional se ha dedicado al trabajo comunitario para la conservación de los recursos naturales en la región mesoamericana. Además es un emprendedor creador de una marca de artículos de cuidado personal elaborados de manera responsable y respetuosa para el medio ambiente. Iván es un salvadoreño que vive en Nicaragua.  

Iván migró cuando tenía un año. La inseguridad y la falta de oportunidades económicas a raíz del conflicto armado empujaron a su familia a buscar mejores condiciones de vida fuera de El Salvador, razón por la cual viajaron a Nicaragua para emprender desde ahí la aventura de ser migrantes. “Mi mamá nos contaba que en aquellos años Nicaragua ofrecía un ambiente de paz y qué por temor a que la guerra nos afectara decidió que lo mejor era salir del país”, recuerda.

Ya establecidos fuera de El Salvador, la madre de Iván se incorporó a un programa de asistencia de las Naciones Unidas que le ayudó a aprender un oficio y sacar una carrera técnica de modo que pudiese incorporarse a la vida productiva. “Desde niño mi mamá me enseñó dos cosas, la primera es a ser trabajador, yo recuerdo que en mi casa siempre hubo una venta de algo, un negocio de flores, una tienda, cualquier cosa para generar ingresos”, dice Iván

“La segunda cosa que mi madre me enseño fue a amar a mi país. Yo crecí sabiendo a la perfección como era San Miguel o los nombres de mis tíos y tías y eso sin haber vuelto a El Salvador, solamente por las historias que mi mamá, mi papá o mi abuela contaban.

Mi familia me enseño el respeto y el cariño por El Salvador; yo fui, como dice Roque Daltón en su Poema de Amor, de los que lloraron borrachos cantando el himno nacional. A pesar que desde que tengo un año vivo en Nicaragua, siempre he sentido nostalgia al estar lejos del país que me vio nacer,” menciona Iván.

Aunque Iván tuvo la oportunidad de obtener la nacionalidad nicaragüense ha optado por no hacerlo, a pesar que considera que la vida en Nicaragua hubiese sido mucho más fácil. “Las personas migrantes somos como injertos, echamos raíces en un país diferente al nuestro, pero no perdemos nuestra esencia, nuestro color. Yo siento que tengo mis raíces aquí, pero me siento salvadoreño”. 

SDG 8 - TRABAJO DECENTE Y CRECIMIENTO ECONÓMICO
SDG 10 - REDUCCIÓN DE LAS DESIGUALDADES
SDG 16 - PAZ, JUSTICIA E INSTITUCIONES SÓLIDAS