El Programa Mesoamérica de la OIM, el Organismo de las Naciones Unidas para la Migración, reunió a funcionarias y funcionarios del Estado de Guatemala, representantes de organismos internacionales y de la sociedad civil para documentar las experiencias, los retos y las buenas prácticas de las Mesas Técnicas sobre Migración instaladas a Nivel Nacional que atienden a poblaciones migrantes, principalmente aquellas en situaciones de riesgo y vulnerabilidad.

La cita fue en las instalaciones del Centro de Formación de la Cooperación Española (CFCE), en la Ciudad de Antigua Guatemala, Patrimonio Cultural de la Humanidad. Llegaron participantes de los departamentos de Petén, a unos 560 kilómetros al norte de esta localidad; Izabal, Quetzaltenango y la Ciudad de Guatemala.

“Estos espacios de convergencia son especialmente importantes para conocer las características de la migración en otras regiones, la manera en la que las autoridades abordan los casos especiales, qué coordinaciones interinstitucionales se hacen y cómo se les da seguimiento”, dijo Gloria González, Coordinadora de la Pastoral Social de Petén.

“En Petén hace falta mucha más presencia de las autoridades estatales en los distintos puntos fronterizos y mejorar la protección de la integridad física de las personas en pasos ciegos; es de vital importancia educar y formar a todos los sectores para elevar la capacidad de eliminación de los estereotipos hacia las personas migrantes, sobre todo en zonas de tránsito y destino”, destacó Helen Méndez, Oficial de Defensorías, de la Auxiliatura Departamental de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), en Santa Elena, Petén. 

Mario Najarro, Juez Departamental de la Niñez y Adolescencia, del Organismo Judicial en Izabal, indicó que “recientemente se instaló la Mesa Transfronteriza de Migración en ese departamento con el propósito de coordinar acciones entre Guatemala y Honduras enfocadas a la asistencia de poblaciones migrantes, principalmente mejorar la protección de niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados”.

“El nuevo Código Migratorio de Guatemala reconoce los derechos humanos de las personas migrantes o sugiere la búsqueda de mecanismos para protegerlas adecuadamente, mientas la Constitución Política de la República amplia el marco de actuación conforme a las ratificaciones de convenios internacionales en materia de derechos humanos”, enfatizó Najarro.

Durante la plenaria final, las y los participantes destacaron la necesidad de alinear las acciones nacionales con la nueva institucionalidad establecida en el Código de Migración, además mejorar los espacios de coordinación interinstitucional y revisar los mecanismos nacionales y locales disponibles. También surgió la propuesta de creación de la red nacional de atención y protección a la población migrante, a la cual dará seguimiento el Programa Mesoamérica.

En la actividad, las contrapartes de la OIM también revisaron la ejecución de la Ventanillas Informativas Municipales sobre Migración, el trabajo de protección que realiza la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) en las fronteras de Petén, los mecanismos de atención a personas extranjeras y en tránsito de la Dirección General de Migración y los protocolos de atención a la niñez migrante no acompañada de la Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (SBS).

El intercambio nacional fue coordinado por el Programa Mesoamérica de la OIM, con el apoyo de la Oficina de Población, Refugio y Migración del Departamento de Estado de Los Estados Unidos de América.